LA GENTE QUE QUIERO Y NO OLVIDO.

LA GENTE QUE QUIERO Y NO OLVIDO.

Así qué soñé un sueño que ni siquiera debi haber imaginado. Después de once años la encontré nuevamente tras aquellas ideas que quise olvidar voluntariamente, aún respiró aquel aroma a libertad que se percibía durante aquellos años, las memorias casuales de una juventud vivida a plenitud, sólo se reflejan tras una sonrisa burda que figuro momentáneamente, mientras trató de afrontar esta idea que desde hace algunas horas no me deja dormir, fue por febrero cuando vi sus largos y rubios cabellos que contrastaban con sus ojos claros. Ahi mismo término y encontré mi nostalgia, fue en aquellos viejos escritorios del "Werner Ovalle" donde viví como se debe. Ese ciclo de educación básica marcaron todo el trayecto que hasta ahora he seguido, en ella encontré la sinceridad, humildad y bondad que años después trataría de practicar aunque mis esfuerzos no se vieran reflejados ni en una quinta parte. Como olvidar que se dormía en mi pupitre cuando le contaba historias... o que tomaba mi cuaderno sorpresivamente para ver lo que le escribia para dejar un simple "lo quiero". los poemas que escribia y encontraba se volvieron una rutina. No comprendo lo complejo que se volvio la vida si para entonces todo se resumia en llegar a clases. Para aquellos años los conceptos eran diferentes hasta el hecho de amarla en secreto, La forma en como se marchó repentinamente en el segundo año me obligó a no olvidarla jamas aunque no tuviera comunicación con ella. Los años han pasado y de ella y de mi solo quedan esos recuerdos. Pero ahora no puedo descansar, como podría soñar que al contrarla de nuevo tendría que despedirme de ella para siempre, sé y espero con el alma que no sea cierta esa idea, pero aún asi solo pensar en eso golpea cada milímetro de mi cuerpo, como es posible que pueda pensar en cosas como esas. Pero desgraciadamente si puedo. Perdí tantos amigos con los que convivi en "Ciudad Quetzal/Mixco" durante mi infancia, fueron tantos los que ya están allá arriba que hasta contarlos se me hace difícil. Alejado en el occidente del país escuchar sobre la muerte de cada uno de ellos sólo dejaba un vacío que la distancia rompía y hacia menos doloroso. Las situaciones en este pais cambiaron mis conceptos e ideología desde hace mucho tiempo. La situacion economica y educativa no es la mejor, pero eso se puede solventar con esfuerzo y trabajo. Lo que realmente lamentó es la ausencia de oportunidades, que fue en realidad lo unico que marco mi futuro y la de aquellos que desafortunadamente ya descansan en paz. En recientes fechas me comentaron que aquella persona que había estudiado con migo y se había fajado trabajando desde pequeño tuvo por diversas circunstancias que emigrar. Cuanto me dolió saber que había fallecido tratando de buscar mejores oportunidades. Por Dios... Era mi amigo, tenía la mismas edad y había vivido las mismas desgraciadas circunstancias. Cuanto he pensado en todas estas cosas ahora que vivo aquí. En realidad, vivir de pequeño en esta ciudad no me ofreció ninguna oportunidad e irónicamente ahora lo hace. Cuán afortunado he sido... Me he distraído con psuedopersonas y cosas insignificantes que he olvidado todas las grandiosas situaciones que me han ofrecido, todas las personas a las que tuve por gloriosa casualidad que conocer. Mi gran familia que por tonto nunca supe comprender al grado de compartir poco o nada con ellos. Cuán distraído he pasado estos años tratando de vivir con lo mejor cuando en realidad lo hacia sin darme cuanta tras aquellos altibajos, que solo trataban de hacerme comprender que la vida es esfuerzo y que ese esfuerzo por consiguiente te enriquece como persona porque te ayuda a valorar todo. Cuanto quice abandonar aquel pueblito tan sólo para darme cuenta que ahí esta mi hogar no por la estructura, ni el frío o las montañas, sino más bien porque allá esta LA GENTE QUE QUIERO Y NO OLVIDO.

HEYDY... no te imaginas cuan dichoso y afortunado me siento de ser tu hermano. No te imaginas lo feliz que me hace saber que terminaste pese a todas las circunstancias que tuviste que pasar. Gracias por darme siempre el valor para seguir caminando. Lamento no estar hoy para poder felicitarte personalmente.

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